El prosito es comentar sobre pasajes biblicos para tener devocionales semanales.
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Wednesday, July 28, 2010
Mateo 13: 1-9/18-23
¿Donde cayó tu semilla? Esa es la pregunta que nos debemos hacer cuando vemos que nuestra vida no va para ningún lado. Las bendiciones no las recibimos, las enfermedades están a la orden del día, no vemos la luz al final del túnel. Jesús nos enseña que quizás la semilla fue bien tirada pero en nosotros no está germinando. De acuerdo a los dos pasajes, de toda las semillas, tres partes no están dando fruto porque nuestras propias necesidades y afanes nos están tapando y matando el crecimiento. En el v.4 el oyente no está adentro de la iglesia y su deseo tampoco, está en el camino y aunque oiga las cosas que hay en el camino son más atractivas para él. El v.5 dice que no tenia profundidad, solo recibió la palabra por emoción y no se siguió instruyendo en la misma. El gozo y alegría del momento se apago ante la primera aflicción porque no tenía base ni quiso aprender de la palabra. La otra parte cayo pero las engañosas riquezas y atracciones de este mundo la ahogaron. Pero, y este pero es bueno, hubo una parte que cayó en buena tierra y dio fruto. El fruto no es solo para ti sino también para otros. Cuando un árbol da frutos no es solo para que lo veas lindo sino para que los otros lo saboreen también. Qué cosa más hermosa para el cristiano que de fruto digno de arrepentimiento. Eso lo logramos cuando nos revestimos del hombre nuevo dejando de lado y despojándonos del hombre viejo (Colosenses 3:9-10). Pablo nos habla de hacer morir las cosas no agradables, no que “tratemos” sino matarlas literalmente de tu vida. ¿Qué es eso que te estorba en tu vida? Es necesario que no solo seas salvo sino también comencemos a caminar una vida cristiana de una vez por todas. ¿Te animas? Dios te bendiga Marcelo Bustos
Wednesday, July 21, 2010
1 Corintios 9:19-25
El apóstol Pablo dice que él se hizo siervo. Antes de su encuentro con Dios, Saulo (nombre de Pablo antes del encuentro), tenia títulos, posesiones, cargos importantes etc. Y para nada pensaba en servir sino en ser servido. Pero después de escuchar a Dios, sentir a Dios y experimentar un cambio, Pablo cambió, no solo de nombre sino de actitud. Vemos en los versículos del 20 al 22 que él se adapto a las diferentes personalidades y situaciones en las que se encontró. ¿Cuál es nuestra actitud ante las mismas circunstancias?, mostrar a la gente cuán grande y estudios que somos y esperamos trato preferencial. Cuanto tenemos que aprender de los hombres de la Biblia. Pero Pablo fue cambiado después de su encuentro con Dios, ¿has tu experimentado ese encuentro? O solo te gusta ir a los servicios o cultos para “escuchar”, cantar, irte a tu casa y seguir siendo la misma persona. El cambio que se produjo en Saulo fue tremendo, y aunque no todos cambiamos radicalmente, no hacemos nada por cambiar. Hay gente en las iglesias que está casi igual antes. Quizás estemos frustrados que cuando queremos cambiar, nuestras amistades o familiares nos hacen burla y nos decepcionamos porque no queremos quedar mal con ellos y queremos abandonar la carrera. Pablo nos insta en el versículo 24 a que nos esforcemos y corramos como si obtuviéramos el premio. Pablo al final de su ministerio dice: “..he acabado la carrera” (2 Timoteo 4”7). Pablo no dijo llegue primero pero corramos como para llegar primero. ¿Estás corriendo todavía? ¿Querés abandonar? No lo hagas porque te espera una corona incorruptible si no abandonas y te esfuerzas hasta el final. Dios te Bendiga Marcelo Bustos
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